El Consejo de Ministros ha aprobado hace un par de meses el Anteproyecto de Ley Orgánica para la protección de las personas menores de edad en los entornos digitales, un paso clave en el marco del gran acuerdo de país que busca garantizar la seguridad, el bienestar y los derechos de los niños, niñas y adolescentes en el entorno digital.
El nuevo marco legal pretende salvaguardar los derechos de los menores en el ámbito digital, con especial atención al derecho a la intimidad, al honor, a la propia imagen y a la protección de los datos personales. Asimismo, se asegura el acceso a contenidos adecuados para su edad.
Medidas clave del Anteproyecto
Entre las principales novedades de la norma se encuentran:
- Tipificación delictiva: Se penaliza la difusión no autorizada de imágenes pornográficas generadas por inteligencia artificial (IA).
- Modificación de la edad de consentimiento: Se eleva de 14 a 16 años la edad mínima para consentir el tratamiento de datos personales.
- Orden de alejamiento online: Se regula la prohibición de contacto digital en casos de acoso a menores.
Protección integral en el entorno digital
El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha destacado que el objetivo de esta norma es crear entornos digitales seguros y saludables para los menores, promoviendo un uso responsable de la tecnología.
El Anteproyecto incluye medidas para mejorar la concienciación sobre los riesgos digitales, tanto para los menores como para sus familias. También sanciona severamente las vulneraciones de derechos en el entorno online, como la difusión de imágenes generadas por IA sin autorización, e impone obligaciones a grandes operadores e influencers para proteger los derechos de los menores.
Obligaciones para el sector público y tecnológico
La norma establece que los poderes públicos deberán elaborar una Estrategia Nacional sobre la protección de menores en el entorno digital, así como impulsar campañas de sensibilización sobre los riesgos digitales, con especial atención al consumo de material pornográfico.
En el ámbito educativo y sanitario, el texto propone medidas para la detección precoz de patologías asociadas al mal uso de la tecnología, y programas de alfabetización mediática y formación en ciudadanía digital. Además, los fabricantes de dispositivos deberán incluir sistemas de control parental activados por defecto y un etiquetado informativo sobre riesgos.
Adaptación a nuevas formas delictivas
El Anteproyecto responde a los nuevos retos delictivos que plantea la tecnología, como el grooming (engaño online a menores) y el uso de deepfakes, adaptando el Código Penal para sancionar estas conductas. También refuerza la protección contra la difusión de material pornográfico a menores, prohibiendo el acceso de menores a mecanismos aleatorios de recompensa en videojuegos y plataformas (loot boxes).
Esta ley supone un avance fundamental para garantizar que los menores puedan desarrollar sus habilidades en un entorno digital seguro y responsable, preservando sus derechos y fomentando su bienestar.
