La semana pasada, el Parlamento Europeo aprobó el texto final de los dos reglamentos que serán clave para garantizar el ecosistema digital dentro de la Unión Europea, esto es el Reglamento de Servicios Digitales (Digital Services Act, DSA) y el de Mercados Digitales (Digital Markets Act, DMA).
Ambas normas tienen por objeto abordar los efectos sociales y económicos del sector tecnológico. “A tal fin, establecen normas claras que regulan, de acuerdo con los derechos y valores de la UE, el funcionamiento y la prestación de servicios por parte de estas empresas en la Unión”, explica el Parlamento Europeo en un comunicado.
¿Qué es la Ley de Servicios Digitales?
Esta norma tiene como principal finalidad combatir los fenómenos que pueden suponer una amenaza para la sociedad, como la desinformación en línea o la difusión de contenidos ilegales. Los nuevos requisitos serán proporcionales al tamaño de las plataformas digitales y a los riesgos que representen para la sociedad.
Los prestadores de servicios intermediarios que estarán sometidos a dicha norma son, entre otros: sitios web, comercios electrónicos, redes sociales, juegos online, archivos en la nube, plataformas de streaming, aplicaciones y servicios de mensajería instantánea.
Las nuevas obligaciones incluyen:
- Acceso a los algoritmos. La Comisión Europea y los países miembros podrán tener acceso a los algoritmos de las grandes empresas.
- Combatir el contenido ilícito y la desinformación. Se habilitará un mecanismo de aviso y acción para que los usuarios puedan denunciar contenidos ilegales. Las plataformas deberán intervenir rápidamente y notificar al usuario sobre la decisión y posterior retirada de dichos contenidos.
- Mayor control de los comercios en línea. Se pretende fortalecer los controles de los comercios de productos y servicios en línea para garantizar su seguridad y demostrar que la información de los comerciantes es fiable.
- Refuerzo de la protección de los menores. Se establecen prohibiciones adicionales a la elaboración de perfiles a partir de información confidencial y a la publicidad dirigida.
- Aumento de transparencia. Más información a los usuarios sobre cómo se elige el contenido publicitario que ven recomendado.
En cuanto a las plataformas y los motores de búsqueda en línea de mayor tamaño, ya que entrañan un mayor riesgo, tendrán obligaciones adicionales en materia de información y transparencia en sus condiciones que la Comisión se encargará de aplicar.
¿Y la Ley de Mercados Digitales?
Aplicable a servicios básicos de plataforma como: servicios de intermediación en línea, motores de búsqueda en línea, sistemas operativos, servicios de plataforma de intercambios de vídeo, navegadores web, asistentes virtuales, entre otros, y que actúen como «guardianes de acceso» en el sector digital.
Para que dichas plataformas puedan ser definidas como tal necesitan reunir tres condiciones acumulativas, es decir:
- Que disfruten, o vayan a disfrutar previsiblemente, de una posición arraigada y duradera.
- Que tengan un impacto significativo en el mercado interior.
- Que posean el control de una pasarela importante entre los usuarios profesionales y los consumidores finales.
Las empresas definidas como guardianes de acceso asumirán la responsabilidad de garantizar un entorno en línea accesible que sea justo, tanto para empresas como consumidores, y que esté abierto a la innovación por parte de todos. Por ello, estarán sujetas a una serie de obligaciones, como son:
- Garantizar que los usuarios finales puedan desinstalar fácilmente aplicaciones preinstaladas.
- Cambiar la configuración por defecto de los sistemas operativos, asistentes virtuales o navegadores web que los dirigen a productos y servicios del propio guardián de acceso.
- Permitir instalar aplicaciones o tiendas de aplicaciones de terceros.
- Facilitar la cancelación de la suscripción a los servicios básicos de la plataforma.
- Permitir a los usuarios profesionales acceso a los datos que generen dentro de estas plataformas.
En contraposición, tendrán prohibido, por ejemplo:
- Utilizar los datos de los usuarios profesionales cuando compitan con ellos mismos en su propia plataforma.
- Clasificar sus productos o servicios de manera más favorable a los ofrecidos por terceros.
- Rastrear a los usuarios finales fuera del servicio básico de la plataforma con fines de publicidad personalizada sin que se haya recabado un consentimiento efectivo.
Ambas normas entrarán en vigor veinte días después de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea.