Hace unos días, nos encontramos en la prensa multitud de titulares que hablaban de que Meta amenazaba con llevarse Facebook e Instagram de Europa, sin embargo, pocos días después desmintieron esta información con el siguiente comunicado:
«No tenemos absolutamente ningún deseo de retirarnos de Europa; por supuesto que no. Pero la simple realidad es que Meta, como muchas otras empresas, organizaciones y servicios, depende de las transferencias de datos entre la UE y los EE. UU. para operar nuestros servicios globales. No estamos solos. Al menos otras 70 empresas en una amplia gama de industrias, incluidas diez empresas europeas, también han planteado los riesgos relacionados con las transferencias de datos en sus declaraciones de ganancias.»
Con estas palabras Meta afirma que depende de las transferencias de datos entre Europa y Estados Unidos para poder operar sus servicios, y es importante recordar que las regulaciones de la Unión Europea prohíben este tipo de movimientos. Los datos de los ciudadanos europeos deben ser procesados, obligatoriamente, en servidores que se encuentren dentro de los límites de la UE.
¿Cuál es el principal problema para Meta?
El origen de esta situación está en la suspensión que decretó el Tribunal de Justicia de la Unión Europea en 2020 del Escudo de privacidad o Privacy Shield, el acuerdo que regulaba el trasvase seguro de datos entre la Unión Europea y Estados Unidos, debido a que el país que recibe los datos debe ofrecer un nivel de protección equivalente al de la Unión Europea y Estados Unidos no ofrece las garantías suficientes.
Al ser Meta una empresa que cotiza en Estados Unidos, tiene la obligación legal de presentar determinada documentación a la SEC, el regulador estadounidense responsable de los mercados.
La privacidad de los datos es el principal problema con el que se han encontrado para desarrollar su actividad en los países europeos, ya que la normativa comunitaria marca una política de privacidad de obligado cumplimiento con la que grandes empresas como Meta no están de acuerdo y amenaza con dejar de operar en Europa si los reguladores impiden la transferencia de datos personales de sus usuarios a Estados Unidos.
En cierta manera, y tras desmentir que quieran salir de Europa, plantean algún tipo de solución que pueda modificar la normativa vigente de privacidad de datos e insiste en mantener el trasvase de datos entre la Unión Europea y Estados Unidos.
La situación no afecta solo a las empresas de Meta. De acuerdo con el directivo, el acuerdo Privacy Shield estaba siendo empleado por más de 5.000 empresas a ambos lados del Atlántico y al menos 70 de ellas han expresado su preocupación por la situación actual en sus informes de resultados.
La importancia de la privacidad de datos en Europa
En esta era la privacidad de datos es de vital importancia, y las normas de protección de datos de la UE garantizan la protección de los datos personales en todos los casos en que se recojan: por ejemplo, al comprar por internet. Estas normas se aplican tanto a empresas y organizaciones (públicas y privadas) con sede en la UE como a las que tienen su sede fuera de ella y ofrecen bienes y servicios en la UE, como Facebook o Instagram, siempre que dichas empresas soliciten o reutilicen datos personales de ciudadanos de la Unión Europea.